Además de los cuatro miembros de Anonymous arrestados por la policía de España, la Interpol reveló que detuvo a 21 hackers más en Chile, Argentina y Colombia en lo que llaman la “Operación Desenmascarar” (Operation Unmask).
La detención se llevó a cabo a raíz de una serie de ciberataques a las páginas web de la Biblioteca Nacional de Chile y de la compañía Endesa en ese mismo país, así como de la presidencia y del Ministerio de Defensa colombianos, entre algunos otros objetivos.
Al catear 40 lugares entre casas y oficinas, en 15 distintas ciudades, los agentes policiacos lograron incautar 250 equipos, incluidos teléfonos y computadoras. Los detenidos, cuyos nombres no fueron revelados, tienen entre 17 y 40 años.
“Esta operación demuestra que la delincuencia en el mundo virtual tiene consecuencias reales para las personas involucradas y que el internet no puede ser visto como un refugio seguro para la actividad criminal, no importa dónde se origina o a dónde se dirige”, dijo Bernd Rossbach, director ejecutivo de servicios policiales de la Interpol.
Responden con fuego
Como respuesta a la detención masiva, el grupo hackivista hizo el llamado, a través de redes sociales como Twitter y Facebook, a lanzar un ataque contra el sitio web de la Interpol.
Más tarde se dio a conocer que la operación denominada “tAnGoDoWn” fue todo un éxito, el grupo de hackes logró “tirar” el sitio de la organización policiaca mediante un ataque de denegación de servicio (DDoS).
El sitio de la institución policial, con sede en Lyon, Francia, permaneció bloqueado durante varias horas antes de que fuera restablecido su funcionamiento.
Un vocero de la Interpol indicó que la organización no hará comentarios al respecto.
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